Al oeste de los Bosques de Arnarath y la Primogenitura de Zitcze, protegida por una cordillera alzada con magia, y al oeste del Dai Shun, se extiende el mayor monumento del Círculo de Magos. Juntando los trozos del antiguo mundo, forjaron, pieza a pieza, La Marca. Un enorme collage compuesto en tres partes: yermo, estepa y tierra volcánica, que son la conmemoración del antiguo mundo de antes del colapso mágico.
Las escasas personas que viven en estas tierras yermas y estériles, podridas de magia, suelen reunirse en pequeñas comunidades para sobrevivir. Bañados en la antigua gloria del Círculo, muchos de ellos se convierten en poderosos magos y hechiceros. El aislamiento natural y la repulsión que ofrece un terreno yermo creado de pequeñas porciones de terreno unidas con magia, lo hace un lugar perfecto para el exilio y la meditación.